El agua de la traída de Lugo figura entre las de peor calidad de España y roza el límite legal que impide calificarla de apta para el consumo, según un informe de la OCU de noviembre de 2006
Los resultados de un estudio realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) apuntan a una clara mejoría de la calidad del agua de grifo en todas las capitales de provincia de España. La investigación concluye que ninguna ciudad, excepto Cáceres, Ciudad Real y Lugo, superan el límite legal de trihalometanos (sustancias volátiles generadas durante el proceso de potabilización del agua y cuya ingesta en periodos prolongados puede ser perjudicial).
La mejoría de la calidad del agua ha sido especialmente significativa en 20 ciudades como Alicante, Ávila, Badajoz, Bilbao, Murcia, Valladolid, Vitoria y Zamora. En contraposición, Lugo ha pasado de 105 µg/litro a 146 µg/litro, muy cerca del límite legal que impide calificar el agua como apta para el consumo. Excepto en casos puntuales, la mejoría que se ha observado indica la eficacia de las medidas correctoras que se están aplicando.
Uno de los objetivos del estudio de la OCU ha sido concienciar a consumidores, administraciones y empresas gestoras sobre el problema que supone la presencia excesiva de trihalometanos en el agua de consumo.
La mejoría de la calidad del agua ha sido especialmente significativa en 20 ciudades como Alicante, Ávila, Badajoz, Bilbao, Murcia, Valladolid, Vitoria y Zamora. En contraposición, Lugo ha pasado de 105 µg/litro a 146 µg/litro, muy cerca del límite legal que impide calificar el agua como apta para el consumo. Excepto en casos puntuales, la mejoría que se ha observado indica la eficacia de las medidas correctoras que se están aplicando.
Uno de los objetivos del estudio de la OCU ha sido concienciar a consumidores, administraciones y empresas gestoras sobre el problema que supone la presencia excesiva de trihalometanos en el agua de consumo.
R.