Aprobada por unanimidad en el Parlamento la Ley Gallega contra la Violencia de Género

Los tres grupos parlamentarios coincidieron en reclamar "unidad" para hacer frente a la violencia sexista y aprobaron por unanimidad la Ley Gallega para la Prevención y Tratamiento Integral de la Violencia de Género que permitirá a la Xunta ejercer como acusación particular en casos de este tipo. El nuevo marco legal también facilitará el acceso de las víctimas a la Renta de Integración Social de Galicia (Risga) y las incluirá, con carácter preferente, en todos los programas de formación e inserción laboral, así como en los programas de acceso a una vivienda. De esta forma, las mujeres gallegas que sufren violencia de género podrán recibir ayudas de la Xunta pese a que no hayan denunciado ante la Justicia, siempre y cuando exista un informe de los servicios sociales o sanitarios que dé cuenta de su situación. PPdeG, PSdeG y BNG destacaron la necesidad de "huir de luchas partidistas" y "unir esfuerzos" para hacer frente a lo que consideraron una "lacra social".

Así, la popular Susana López Abella argumentó el voto favorable de su grupo para evitar la politización de una materia "tan sensible" y para dar un "voto de confianza" al bipartito en la lucha contra los maltratadores. "Sabemos que queda un largo camino y no queremos luchas partidistas. Por eso seremos serios y esperamos de la Xunta el mismo trato", advirtió al tiempo que sugirió que su apoyo es "leal pero crítico".nLa diputada del PPdeG también pidió "rigurosidad" a la Xunta y que evite manifestaciones "grandilocuentes" sobre lo que supondrá esta normativa en Galicia. "Hay que responder de forma apropiada y realizar un trabajo intenso en prevención e integración", añadió.

"Estamos seguros de que no podemos caer en la autocomplacencia ni que hay baritas mágicas para resolver este problema, pero estamos dando un paso trascendente y conseguimos que la lucha contra la violencia de género no se reduzca a la voluntad coyuntural de un gobierno de turno", le respondió el vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, quien intervino al final del debate para destacar que la nueva ley es un "instrumento necesario" para "acabar con esta lacra social". Así, subrayó que el nuevo texto legislativo es "más sensible" a una realidad "vergonzosa", "más solidario" con las víctimas y "más intolerante" con los agresores. "Seguiremos luchando contra ellos, pero, ahora, con más medios", proclamó el máximo responsable autonómico en material de igualdad.

También, socialistas y nacionalistas destacaron la implicación de los tres grupos en la aprobación de esta ley. Así, la diputada del PSdeG Laura Seara destacó que esta norma "recibe un claro respaldo" y permitirá que Galicia cuente con un "marco legislativo propio" para hacer frente a la violencia de género. Además, afirmó que esta lacra es una "tragedia" a nivel mundial y recordó que este año ya han muerto en España 48 mujeres a mano de sus parejas, lo que supone un ratio de una víctima mortal cada cinco días. Por ello, reclamó la implicación del Ejecutivo gallego con inversiones y "compromisos claros", aunque advirtió de que la norma "no va a acabar con el problema de un plumazo".

La nacionalista Ana Belén Pontón destacó que esta ley supondrá cambios "profundos" en las instituciones y en la "mentalidad" de la gente para afrontar "de otra forma" esta lacra. Además, reclamó modificaciones en el tratamiento informativo de los casos de violencia de género.n"Hoy es un día importante para el BNG porque se aprueba una de las iniciativas más importantes de la legislatura y se pone en el primer plano de la actualidad política una cuestión fundamental para la dignificación de las mujeres", indicó.

Finalmente, socialistas y nacionalistas transaccionaron una de las diez enmiendas que mantuvieron los populares al texto legislativo, que define lo que deben ser las órdenes de protección. La nueva ley, además, establece la creación de oficinas de atención a las víctimas en todas las provincias gallegas, que estarán dotadas de personal cualificado que ofrecerá información y apoyo a las mujeres que sufren violencia de género para que puedan ejercer sus derechos.